Se ha celebrado en la Universidad de León, organizado por la Escuela Nacional de Protección Civil y la Subdelegación del Gobierno de León, la jornada sobre el marco normativo y la planificación de protección civil en grandes concentraciones humanas.
Con un apretado cronograma, como suele ser habitual en este tipo de eventos, se dio un repaso a los actos de pública concurrencia y sus repercusiones penales y civiles, con el profesor Miguel Díaz y García Conlledo; los Planes de Autoprotección y planes de seguridad en los actos de pública concurrencia, con la Jefe del Servicio de Protección ciudadana de la Junta de Castilla y León Esperanza Garrido del Amo; Stela Hernández, Jefe del Servicio de Espectáculos Públicos y Actividades Recreativas, reflexionó sobre las Autorizaciones administrativas según la Ley de espectáculos públicos de Castilla y León, y, José Carlos Baeza, Subdirector Adjunto de Planes, Operaciones y Emergencias nos mostró las particularidades y detalles de la Operación Paso del Estrecho 2013.
En la jornada de tarde miembros de la Asociación Nacional de Especialistas Profesionales en Protección Civil y Emergencias mostraron los problemas de coordinación entre los servicios y administraciones en una operación de emergencia – José María Pino-, y se repasaron ejemplos concretos de despliegues como Las Justas Medievales de Hospital de Órbigo – Ángel Sánchez Sacristán – , y el Plan de Autoprotección del Ayuntamiento de La Coruña para las fiestas de San Juan con María José Rodríguez Sanjurjo.
De todo lo comentado sería bueno desgajar, sin ánimo de exhaustividad, algunas conclusiones a modo de resumen:
En el ámbito de la seguridad, la prevención y las emergencias es vital conocer las competencias y obligaciones de cada uno de los agentes implicados para no incurrir en posibles responsabilidades penales o reparadoras, tanto por conductas activas como por omisión de las mismas.
Se celebran a diario multitud de actos públicos en los que bien por sus características intrínsecas, bien por la afluencia de personas, bien por condiciones extrínsecas precisan la redacción de un Plan de Autoprotección o Plan de Seguridad y Emergencias que permita una adecuada evaluación de los riesgos y una cuidada planificación de las medidas de prevención y seguridad.
La Ley de Espectáculos Públicos y Actividades Recreativas de Castilla y León recoge una serie de obligaciones para los organizadores de este tipo de actividades, entre las que, en función del tipo y magnitud del evento, puede incluir la redacción de Planes de Autoprotección que deben ser incluidos en la documentación previa necesaria para la licencia o autorización administrativa y redactados por técnico competente.
Las entidades locales, muchas veces con pocos medios y mucha ilusión, tiene la obligación moral de velar por la seguridad de los eventos que organicen, aunque en muchas ocasiones no estén obligadas por una normativa especifica.