Irene siempre quiso aprender a hacer el pino en la pared. Todos queríamos aprender a hacer el pino sin pared, pero a mí se me daba mejor cantar, bueno quizás tampoco se me daba del todo, bueno pues escribir versos, bueno pues leerlos, bueno pues bailarlos. Teresa y Víctor prefieren bailarlos.

Partimos del espacio del cuerpo que, inquieto, busca la posición más cómoda o más extraña desde donde decir un verso. El verso es el camino estrecho que se expande y abre paso a las palabras más enamoradas o más tristes y permite respirar al alma más encogida. El cuerpo encuentra en la inversión una sensación de extrañeza, una incomodidad o incluso un dolor placentero que le recuerda que sigue vivo. La inversión como ventana para un cuerpo que por momentos quiere tomar la palabra.
La obra se va entendiendo a medida que se construye, aún no la entendemos del todo… Son los propios interrogantes sobre el sentido y la forma de la danza, son las propias dificultades y torpezas del cuerpo.

Una danza colectiva para el cruce, para el choque de los cuerpos, para el encuentro del espacio con la palabra, del texto con la voz, del movimiento con el silencio. Una danza sin danza donde apenas la notación coreográfica escribe sobre ella misma. Una lectura improvisada con algunos fragmentos escritos para la identidad (de la danza) y la memoria (del cuerpo).
Escritura horizontal y escritura vertical. Libros y zapatos, hojas y pizarra, asiento y trapecio.
In verso se estrenó en el Teatro El Albéitar el 3 de diciembre de 2009. Muchas gracias a Julia G. Liébana por aguantar nuestros ensayos, y por sus fotos, claro. Y al Diario de León por su atención.

El primer taller estable de Telas aéreas comenzó en la Universidad en el curso 2008/09, si bien el curso anterior (dic.07) ya se había organizado un curso intensivo sobre esta misma disciplina.
El 13 de junio de 2008 Rosario Granell dirigió esta primera improvisación en diferentes espacios del barrio de La Lastra con las alumnas del taller de Danza contemporánea de la ULe, que dio comienzo como actividad estable del Aula este curso 2007/08. Gracias a Abel Morán y Kike Martínez por estas 
Entre la espalda y la pared y más allá, entre la cámara y el cuerpo que baila, surgen nuevos espacios y nuevos tiempos para el cuerpo. Mirando desde la espalda, enfocando desde atrás, refugiándonos en la pared, siempre a la escucha, recogemos las emociones, reconstituimos las imágenes, nos tomamos nuestro tiempo.
La tela aérea es el soporte para los juegos de ocultación y metamorfosis, para las ataduras y los deseos de liberación y vuelo, para las caídas, para explorar los entresijos del alma y abrazar la nada… y también para contar la locura, cada uno la suya. Locura de atar, locura de amor o danza de locos, la locura oscila entre la privación del juicio o la exaltación del ánimo y la vivencia de lo extraordinario, lo impredecible, lo excesivo o descontrolado. Entre la locura de las luces, la música, la multitud y el alboroto, alguien se encuentra a oscuras y en silencio, quizás perdido o terriblemente solo…
El árbol es un juego de dualidades, sombra y luz, profundidad y superficie, quietud y movimiento, encuentro y soledad, es un espacio que contiene todas las formas, y nos proporciona una encrucijada de caminos. La ternura de su imagen contrasta con la aspereza de su abrazo. Por eso el abrazo, a veces, se conforma con la mirada. Por eso el abrazo, cuando llega, antes de ser encuentro es ya una despedida.
El 29 de noviembre de 2005 se estrenó
Participantes: Cristina Morán, Ángela Hernández, Pilar Millán, Patricia García, Irene Alonso, Raquel Fernández, Norma Pardo, Cristina Barcenilla, Víctor Esteban, Verónica Rodríguez, Alicia Gutiérrez, Carolina Ramos, Pedro José Valera, Paula Flecha, María Rivaya, Alejandro García, Víctor Martínez, Nerea Martínez, Esther Monzón, Paz Brozas y Teresa García. Gracias a todos, y también al